La analítica web de datos es una gran aliada para descubrir cómo se comportan los usuarios en tu site y poder tomar decisiones al respecto. Puede que viendo tus estadísticas te des cuenta de que necesitas modificar tu página de home porque tiene una tasa de salida y una tasa de rebote especialmente altas o que descubras que cierta landing page no está convirtiendo lo suficiente y decidas mejorarla. Sin embargo y a pesar de lo fundamental de los programas de analítica, puede que notes que te hace falta algo más para comprender mejor a tu público objetivo. Es aquí donde entran en escena los mapas de calor. ¿No sabes qué son ni cómo funcionan? Tranquilo, nosotros te lo contamos y te explicamos además los tipos de mapas de calor que hay.
Índice
Empecemos por el principio, ¿qué son los mapas de calor?
Los mapas de calor, también conocidos como heatmaps permiten conocer diferentes datos acerca de cómo navega el usuario por una web. Así, mediante una representación visual que simula las clásicas imágenes térmicas (en el que el color rojo es el punto más elevado de interacción y el azul el rango más bajo) puedes descubrir en qué se fijan tus visitantes.
Gracias a estas herramientas podrás conocer aspectos realmente importantes que te van a ayudar mucho en tu negocio, como por dónde pasan el ratón tus visitantes, hasta dónde hacen scroll o en qué zonas hacen clic. De hecho, muchos de los programas te permiten hacer grabaciones para ver cuál es la interacción de cada usuario. No está nada mal, ¿verdad?
Eso sí, en ningún momento se revelará la identidad del usuario, simplemente se mostrarán sus interacciones. Algo ideal para incrementar los ratios de conversión a la vez que se mejora la experiencia del usuario.
¿Qué tipos de mapas de calor existen?
Los mapas de calor se pueden dividir en tres tipos: mapas de clics, mapas de movimiento del ratón y mapas de scroll. Veamos cómo funciona cada una de estas herramientas.
Mapas de clics (click heatmaps)
Este tipo de mapas de calor muestran dónde suele hacer clic el visitante, por lo que está especialmente recomendado para webs que se dediquen a la venta, como e-commerce o páginas de marca personal que vendan por ejemplo cursos así como páginas dedicadas a la afiliación.
Evidentemente, además de localizar los puntos en los que existen más clics, también sirven para descubrir los lugares en los que hay más riesgo de fuga, como una zona con gran interacción, pero donde no hay ningún enlace y que, por tanto, podría estar bajando tus conversiones.
Mapas de movimiento de ratón (hover heatmaps)
En este tipo de mapas de calor se registra los movimientos que hacen los usuarios con el ratón. Aunque no tienen una fiabilidad del 100% (porque puede ocurrir que los movimientos que haga el usuario con el puntero no se alineen con el movimiento de sus ojos) es una herramienta que si se complementa con otros mapas puede aportar mucho valor a los datos.
Mapas de scroll (scroll hitemaps)
Los mapas de calor de scroll muestran hasta dónde hace scroll el usuario. Así, esta herramienta es especialmente útil en las landing pages porque se puede saber a la perfección qué contenido ven los visitantes y, conociéndolo, te da la oportunidad de reorganizar su estructura si no está funcionando bien.
¿Cuál es la utilidad de los mapas de calor?
Como hemos visto, los mapas de calor te pueden ayudar a conseguir más datos de tus visitantes y hacerte una idea más fiable de cuáles son sus comportamientos y actitudes en tu página web. Pero además, tiene aplicaciones concretas que te vamos a poner a continuación como ejemplo.
Comprobar que tus CTA funcionan correctamente
Como sabes, en cada página de tu web existe una estructura y una jerarquía determinada, con diferentes llamadas a la acción tales como “compra ya”, “descúbrelo” o “suscríbete a nuestra newsletter”. Pues bien, una de las funcionalidades de los mapas de calor es saber si estos CTA funcionan correctamente o si por el contrario hay que modificar alguno de ellos.
Analizar los procesos de conversión
Otra de las funcionalidades de los mapas de calor se puede traducir en analizar cada paso en las diferentes fases del proceso de compra y mejorar de esta manera las ventas a la vez que se reduce la tasa de carritos abandonados.
Saber si la información que se ofrece es efectiva
Cada elemento de una web tiene su funcionalidad, pero tal vez no siempre sea efectiva. Con los mapas de calor se puede saber por ejemplo si un determinado botón del menú recibe interacción o no y si se debe modificar por otro.
Además, imagina que hay muchas personas que pinchan en una palabra determinada, pero no hay ningún link en ella, tal vez se podría barajar la posibilidad de incluir uno y ayudar a que la experiencia final del visitante fuese más satisfactoria.
Herramientas para crear mapas de calor
Actualmente existen en el mercado numerosas herramientas que te permiten crear mapas de calor. Cada una de ellas tiene unas particularidades que la diferencian del resto, por lo que llegados a este punto tendrás que escoger la que mejor se adapte a tus necesidades.
Y, aunque la mayoría de las herramientas son de pago, sí que suelen dar la opción de prueba gratuita durante unos días para que sepas cómo funcionan y decidas si te interesa o no.
También existe alguna versión gratuita, entre las que se encuentran Yandex Metrika, que ofrece mapas de calor de scroll y de clic y solo se encuentra en dos idiomas: inglés o ruso. Por otro lado, con el plugin de WordPress Smartlook puedes crear vídeos para conocer mejor cómo se mueven tus usuarios por la web.
¿Estás listo para crear mapas de calor? Si necesitas ayuda, no dudes en contactarnos. Nuestros expertos en analítica te guiarán y acompañarán en cada fase de tu proyecto para que consigas alcanzar tus objetivos. Porque, lo que no se puede medir, no se puede mejorar.
